lunes, 29 de diciembre de 2008

Cifra

de aquellos jardines enredados
en los que se vacía la ceguera
no se esperan maromas
ni dudas.
un terco plumaje de ruptura
se apoya entre las rejas:
lujo de roedores.

garúan los silencios.
una caricia burda
intenta sobornar
la cifra
de mis venas encofradas.

esta cal negra me copula
hasta tatuarme el himen
con un rayo de hielo.

sí.

soy sola.
la insigne muestra
de tu espanto:

vos también.

2 comentarios:

Cristian Piné dijo...

Hola!
Sabes que me hice seguidor de tu poesía en cuanto te leí por primera vez. Ahora también tengo el lujo de seguirte por aquí.

Un beso.

Bibiana Poveda dijo...

Cristian!!!! Muchas gracias... es una alegría para mí, tenerte entre mis ex-critos.
Un beso!